Adiós, querida esposa Ilusión de tantos sueños Dueña de mi vida rosa Adiós, perdóname Adiós, mujer hermosa Comprensión de mis sentidos De mis traumas encondidos Adiós, reina mía, adiós Ya que en el mundo no pudo ser Entonces en el cielo será Que tú puedas amarme como yo A ti, hasta la eternidad Que hoy de esta injusta separación Culpable fui, tal vez sin razón Pero Dios sabe que nadie logró Sacarte de mi corazón Adiós, querida esposa Abrigo entero de mi ser Empiezo a sentir el frío y sin ti Veo entre el miedo el amanecer Si aquí en el mundo no pudo ser Entonces en el cielo será Que tú puedas amarme como yo A ti, hasta la eternidad Que hoy de esta injusta separación Culpable fui, tal vez sin razón Pero Dios sabe que nadie logró Sacarte de mi corazón Adiós, querida esposa Abrigo entero de mi ser Empiezo a sentir el frío y sin ti Veo entre el miedo el amanecer