He pedido al cielo que me traiga algo más que simples pensamientos. Lo daría todo por tocarte y besarte tan sólo una vez más. Sin darme cuenta me he quedado solo, no tengo a nadie ni nada en qué creer. En tus manos mi felicidad dejé, y ahora me muero, muero sin tu querer. Con tu muerte has dejado en mí un vacío que nadie podrá llenar. Cada día estoy más confundido. Te busco; sé que tú no volverás. Como un niño, me pierde el corazón, tengo miedo, miedo a este triste final. En mis ojos, hoy han vuelto a brotar esas lágrimas, lágrimas de soledad. Lágrimas de soledad. (BIS*)