Se llevó mi sed, mis besos, mi pan, mi violencia, mi pasión.
Ahora donde iré con un alacrán en lugar de corazón.
La perdí por K.O., con el campeón desapareció del ring,
"No me busques, ciao", escrito dejó en el espejo con carmín.

Y los perros del mercado ladraron al escuchar
la balada del abandonado con un saxofón desafinado
la canción que cantan de bar en bar los que beben para olvidar.

"Eh, tu, ponme un trago más", "lo siento señor, pero cerramos a las tres
¿Eran Cutty Sark?, dos mil, por favor, le invitamos al café.
Ya le he dicho que su chica no está, vino pero se marchó
¿qué sé yo con quién? pagaron y en paz, no me llamo Sherlock Holmes".

Y los gatos del mercado maullaron al escuchar
la balada del abandonado con un guitarrón desafinado
la canción que cantan de bar en bar los que beben para olvidar.

El radiocassette de un taxi escupió un viejo blues de B. B. King
sobre un tipo que por celos mató, baby, en Menphis (Tennesse).

Y las ratas del mercado saltaron al escuchar
la balada del abandonado con un corazón desafinado
la canción que cantan de bar en bar los que beben para olvidar.

Únete a la balada del abandonado con un saxofón desafinado
la canción que cantan de bar bar los que beben para olvidar.
La balada del abandonado con un vozarrón desafinado
la canción que cantan de bar en bar los que beben para olvidar.

La balada del abandonado con un vozarrón desafinado
la canción que cantan de bar en bar los que beben para olvidar...