No niego que fuiste tu, 
el gran amor de mi vida 
Pero ese amor se murio, tu bien lo sabes 
Por mi pobreza fatal, me abandonaste 
Mi corazon sin piedad, lo destrosastes 

Llorando te suplique, que no te fueras 
Te deslumbro el oropel, y los placeres 
Se te olvido que el placer, pronto se acaba 
Que el brillo del oropel, no vale nada 

Si tienes hambre de amor, 
la mesa ya esta ocupada 
Si acaso buscas placer, 
estas muy equivocada 

Porque en las cosas de amor, 
mi corazon, es muy sincero 
No niego que te adore, 
pero ya ves, ya no te quiero.